Aragoneses o la historia del portero que se ha ido a África a combatir el coronavirus
La lucha que el mundo entero está librando contra el COVID-19 está sacando lo mejor de millones de personas. Una de ellas es Alberto Aragoneses, portero madrileño de 26 años y exfutbolista de Sanse, Unión Adarve y Villaverde, entre otros clubes semiprofesionales de Madrid.
El guardameta, que la pasada temporada militó en el Dalvik de Islandia, cambió hace un par de meses la portería el Alcobendas Sport por embarcarse en uno de esos proyectos que dicen que son los que realmente llenan: se hizo voluntario en la ONG Meraki Bay y se marchó a Sudáfrica para ayudar a los que más lo necesitan. Algo que ya había hecho varios años atrás, cuando marchó a Brasil para ayudar en varias de las zonas más desfavorecidas del país.
Pero al poco de desembarcar en el continente africano, el coronavirus entró en escena. Fue entonces cuando Alberto y otros dos voluntarios de su organización hicieron lo que pocos hubieran hecho: optar por quedarse allí intentando ayudar a contrarrestar un virus que ahí puede ser más letal que en cualquier parte del planeta en lugar de volver a España para pasar el confinamiento con sus seres queridos.
Proyecto 'Las Zapas Limpias'
Allí, el portero y sus dos compañeros pusieron en marcha el proyecto 'Las Zapas Limpias', un 'crowfunding' con el que pretenden recaudar dinero para que casi una veintena de países de África, entre ellos Zambia, Mozambique, Tanzania, Malawi y Kenia, puedan luchar por hacer frente al coronavirus. Una iniciativa a la que puede sumarse cualquier persona desde cualquier parte del mundo y que nace con el único objetivo de intentar que millones de personas tengan su oportunidad de vencer a la pandemia.